Es
increíble como rodeado de miles de personas me siento solo.
Aunque
sea por un momento……
Pronto
un linyera me cuenta la historia de su vida.
Y
felizmente comparte su vino conmigo.
Mientras
tomo me pregunto sobre la suerte de la tómbola.
Y
allá van los fixies como hispanas saetas esquivando autos y centellas…
¿sabrán
que no son intrépidos mensajeros neoyorquinos?.
¿Sabrán
que están en Buenos Aires?.
¡1 auto menos! ¿No me digas que se compra?.
¡No!
mejor no me lo digas, no quiero saberlo.
Y
ahí esta el cartelito de la casa de jeans.
Seguido de esto la obra máxima: el vaquero especializado.
¿Tanta
historia por dos tiritas triple eme?
¡Hazlo
tu mismo! Te aseguro que es mejor*.
Después de tanto tiempo pedaleando,
comienzan
a florecer caras conocidas.
¡Alegría!
Hay vino para combatir el frio.
Gritos por acá, histeria por allá
Y
el parlante a todo volumen,
que
no me deja conversar,
que
no me deja escuchar.
Y como en otros tiempos empiezan a florecer los lideres berettas
¡Que
diría Roberto Gómez
Bolaños si te viera!
Caerás como otros miles
Y en el medio de la
romería ciclística te veo a ti,
En tu bici, la cual manejas con
soltura y gracia
Generando en mi gran admiración.
Intercambiamos palabras y cerveza,
Pero esa maldita bandera lo arruina
todo…si al menos fueras binorma….
Aburrido y con frio
terminamos donde siempre: obelisco.
¿Acaso sabrán que la masa no tiene
destino fijo?
Pienso a creer que no. ¡Qué ironía!
En el siglo de la comunicación cuanta
gente mal informada.
A cinco minutos del
obelisco me espera un wok alegre de recibir fideos tomate crema un poco de
carne pimentón y queso a por montones. Para levantar el espiritu. Ya volverán las masas verdaderamente críticas y sin lideres
Francesco Malatesta
*Se las podes pegar vos (se
consigue en ferreterías amigas), será mas barato y aunque te miren con
desprecio los de la moda en bici (en realidad te admiran profundamente porque a
vos no te afecta su estrechez mental) serás la sensación del momento ¡hala!
